Sobre estos ejes se asienta la política de transición
del Gobierno Vasco, que sitúa en un horizonte de 10 a 20 años la
transformación de los cuidados, principalmente en el ámbito de los
servicios sociales. Para lograr estos objetivos, se debe implicar a los
diferentes agentes, comenzando por las instituciones, pero también colaborando
con las empresas, las organizaciones del tercer sector y la familia o la
comunidad. Desde el Gobierno Vasco incidieron en que el llamado 'cuidado
social' permitirá un nuevo equilibrio y redistribución de las
responsabilidades, permitiendo, entre otras cosas, acabar con las desigualdades
que generan los cuidados. La perspectiva de género vuelve a cobrar fuerza en
este modelo de transición, ya que las personas cuidadoras son actualmente en su
mayoría mujeres.
“El cuidado no debe soportarse sobre situaciones de
cuidado familiar inadecuadas como sucede, por ejemplo, cuando mujeres
en situación de dependencia, que precisan ellas mismas de apoyos, cuidan 365
días, las 24 horas, a familiares; o en el caso de las familias monoparentales
con mujeres pluriempleadas y sin soportes para el cuidado de sus hijos e
hijas”, expuso la consejera de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales, quien
también ha hablado de “asignar un rol” a los hombres en el cuidado familiar e
institucional.
A juicio de Artolazabal, “alcanzar un nuevo equilibrio
en los cuidados implica también extender la responsabilidad sobre los cuidados
del plano personal a la esfera familiar, comunitaria y pública”. Lograr estos
objetivos pasaría, según argumentó, por reforzar los cuidados
institucionales, particularmente de las personas más jóvenes y mayores,
reduciendo “la proporción que representa el cuidado familiar respecto al
institucional” y fortaleciendo “la atención primaria y secundaria en la
comunidad”.
La consejera añadió que el trabajo del Gobierno
Vasco es transversal y está interconectado con otros agentes y departamentos en
el marco de una política integral de cuidados. Asimismo, ha puesto en valor
algunas de las experiencias que se están llevando a cabo, fruto del trabajo
conjunto de su Departamento con diferentes entidades, algunas de ellas
presentes en el encuentro. Así, se ha referido, por ejemplo, a BetiON, el
servicio de teleasistencia, y a 'OK en casa', aplicación de apoyo a personas
cuidadoras.
El encuentro contó con la participación de
representantes de las principales entidades y redes dedicadas a la
atención de dependencia, infancia, juventud y mayores como Matia Fundazioa,
Euskofederpen, BetiON, Lares, Agintzari, Hirukide, AFAE, Unicef, SIIS, Edeka,
Fevas, Biltzen y Novia Salcedo. Tras las intervenciones, todos ellos pudieron
compartir con Artolazabal, Amilibia y López-Arostegi sus consideraciones sobre
la exposición, así como de los problemas y las necesidades de los cuidados.